El día de San Valentín es una celebración tradicional que ha sido aceptada por la Iglesia católica con la designación de San Valentín como patrón de los enamorados. Se hizo popular en muchos países debido a que es muy publicitada por los grandes centros comerciales de las principales ciudad del mundo. Se celebra el 14 de febrero, onomástico de san Valentín. En algunos países se conoce como día de los enamorados y en otros como el día del amor y la amistad. Si bien casi todo el mundo occidental celebra esta tradición, pocas personas sabes cómo o de donde surgió esta costumbre.
En los primeros años del imperio romano se celebraban en Roma una fiesta pagana dedicada a la fertilidad, llamada Lupercalia. Durante esta fiesta las mujeres esperaban ser golpeadas con látigos hechos de piel de cabras y perros, mojados en la misma sangre de estos animales, ya que creían que este ritual les otorgaba fertilidad. En ese tiempo la mortalidad infantil era bastante elevada de modo que era importante tener muchos hijos. Por lo tanto, las personas que, por cualquier razón, tenían pocos hijos o ninguno se sometían a ritos religiosos o místicos para asegurarse la fertilidad y uno de los ritos más famosos era la Lupercalia, que llevaba ese nombre porque los romanos tenían un lugar sagrado donde (según la leyenda) la loba había amamantado a Rómulo y Remo, los gemelos fundadores de Roma, Ese lugar era llamado el Lupercal, de la palabra latina lupus, que significa ‘lobo’.
En ese lugar, todos los 15 de Febrero tenía lugar una celebración llamada Lupercalia, durante la cual se sacrificaban animales (eran muy típicos los sacrificios, de cualquier cosa). Se preparaban correas con tiras ensangrentadas de la piel del animal (puajj) y los sacerdotes corrían entre la multitud golpeándola con esas correas, se creía que los que recibían golpes se curaban de la esterilidad. Por estos hechos las festividades lupercalianas estaban asociadas con el amor y el sexo.
Siglos más tarde, en el año 496, el papa Gelasius prohibió la celebración de Lupercalia por las actividades pecaminosas que hay se realizaban e e instauró el 14 de febrero como día de la fiesta de san Valentín, quien fue un sacerdote que la iglesia convirtió en santo por intentar ayudar a escapar a los cristianos de las cárceles de los romanos, y que murió el día 14 de febrero, 269 A.D. La historia cuenta que San Valentín habría servido como cura en el templo durante el reino de Claudio III cuando el Emperador decidió que los hombres jóvenes debían todos ser soldados, y no distraerse, por lo que prohibió el matrimonio. Valentín se dió cuenta de la injusticia del decreto y siguió dirigiendo el rito de matrimonio para parejas jóvenes en secreto hasta que fue descubierto por Claudio quién le le encarcelaría por el desafío, quien lo encarcelo y posteriormente ejecutó.
Según la leyenda, San Valentín dejó una carta de despedida a la hija del carcelero de quien se había enamorado durante su encarcelamiento, y esta carta sería la primera carta de amor de San Valentín. Dejó al final de la misma su firma “De su Valentín”, firma que se convertiría en popular para las parejas que se envían tarjetas con frases de San Valentín.
La historia termina cuando las fiestas lupercalianas se siguieron festejando, pero al ya no tener el apoyo de la iglesia bajo mucho su intensidad, así que el festival lupercaliano del 15 de Febrero pasó al 14 de Febrero, que fue decretado día de San Valentín, que es el que actualmente se festeja.